El té verde y la matcha son bebidas amadas no sólo en Japón sino en todo el mundo.
Sin embargo, aunque estos tés pueden parecer similares a primera vista, existen diferencias significativas en sus métodos de fabricación, sabores y formas de beber. Aquí te explicaremos las diferencias entre el té verde y la matcha.
¿Qué es el té verde?
El té verde es un término general para el té elaborado sin fermentar las hojas del té.
Ejemplos específicos incluyen sencha, gyokuro, bancha y hojicha.
¿Qué es la matcha?
Como mencionamos anteriormente, la matcha es un tipo de té verde.
Es un polvo elaborado a partir de hojas de té llamado tencha que se muelen en un mortero blanco.
Tencha se produce mediante “cultivo de cobertura”, que consiste en cubrir las hojas de té con persianas de bambú o paja para protegerlas de la luz solar directa.
Bloquear la luz solar aumenta la clorofila, lo que hace que las hojas del té adquieran un color verde brillante y les dé un dulzor y un sabor más fuertes.
La principal zona de producción es la prefectura de Kyoto.
Debido a su forma de cultivo solo hay un número limitado de plantaciones de té en Japón que tienen el entorno adecuado para hacerlo.
¿Cuál es la diferencia entre matcha y té verde?
Como puedes ver, la matcha es un tipo de té verde, pero el método de fabricación y el método de elaboración son muy diferentes a los de otros tés verdes. Explicaré las diferencias para cada punto.
Hoja de té
Generalmente, el té verde conserva la forma de las hojas de té.
Matcha, por otro lado, no conserva la forma de las hojas de té y es un polvo fino y suave.
Proceso de manufactura
En el proceso de fabricación del té verde, después de cocinar al vapor las hojas de té, hay un proceso de enrollar las hojas de té con una máquina para eliminar la humedad y hacer que el té sea uniforme.
La matcha se elabora cociendo al vapor y secando las hojas de té para luego molerlas hasta convertirlas en polvo usando un molino de piedra sin enrollarlas.
Ingredientes nutricionales
Matcha tiene el mayor contenido de catequinas entre los tés verdes. La cantidad de hojas de té que se utiliza en una taza de matcha light (60ml aproximadamente) es de 2g, pero la cantidad de catequinas que contiene es de 200mg aproximadamente.
Por otro lado, el contenido de catequinas de 100ml de extracto de sencha es de 16,3mg, y de bancha de 4,6mg, por lo que puedes comprobar qué tan alto es el contenido de matcha.
Color y aroma
El color del té verde varía ligeramente según el tipo de hojas de té, la región de origen y el método de fabricación, pero generalmente es de un color verde pálido y claro.
La Matcha, en cambio, es menos transparente y tiene un color verde oscuro.
El té verde tiene un aroma refrescante y azulado, mientras que la matcha tiene un aroma más dulce y profundo.
Sabor
En comparación con el té verde, la matcha es menos amargo y tiene un dulzor suave.
Una de las razones es que la matcha se cultiva a cubierto.
Cultivar hojas de té mientras se bloquea la luz solar evita que la teanina se convierta en catequina, el componente que causa el amargor. Por lo tanto, la matcha no tiene ese sabor amargo o astringente y tiene un dulzor y sabor fuerte.
Como beber
La forma de beber matcha y té verde también es completamente diferente.
La matcha está en forma de polvo, así que vierte agua caliente en una taza de té para preparar té.
El té verde utiliza hojas de té, por lo que coloque las hojas de té en un colador de té o en una bolsita de té, luego vierta agua caliente y prepare.
Contenido de cafeína
La matcha tiene un contenido de cafeína particularmente alto entre los tés verdes. Comparando el contenido por 100 g.
Matcha 3,2g
Sencha 2,3g
Aunque no se han informado efectos secundarios importantes del matcha en sí, debido a su alto contenido de cafeína, los niños y las personas embarazadas o en período de lactancia deben tener cuidado al beberlo.
Método de almacenamiento y fecha de vencimiento.
Dependiendo del producto, la fecha de vencimiento de la matcha suele ser de 8 meses a 1 año si no se abre. No se diferencia de otros tés verdes.
En particular, la matcha es más susceptible al deterioro de la calidad que otros tés verdes. Es especialmente sensible a las altas temperaturas y la humedad, por lo que es importante cerrarlo herméticamente y guardarlo en el frigorífico o congelador.
Si tiene matcha sin abrir almacenado en el refrigerador o congelador, asegúrese de dejar que alcance la temperatura ambiente antes de abrirlo. Si abres la matcha mientras aún está frío, la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior del paquete provocará condensación, lo que puede tener un efecto negativo en la calidad de la matcha.